Esta es una de las escenas de película musical que me quedó grabada en la mente a lo largo de los años. Para saborearla debidamente, deberías haber visto la película
ALL THAT JAZZ, con tintes autobiográficos de su director,
Bob Fosse * , aunque puedes clicar en el enlace y hacerte una idea.
El número musical escenifica la despedida de sus conocidos, familiares y de la Vida en general (en la presentación inical se hace hincapié en que no tiene amigos) por parte del protagonista (
Roy Scheider), llevado de la mano por el maestro de ceremonias de un imaginario
show televisivo (
Ben Vereen), en una recreación del famoso
"Bye Bye Love" popularizado en 1957 por
The Everly Brothers.
Los arreglos de este Bye Bye Life son algo extraordinario, con una instrumentación potente, con unos contrastes sonoros apabullantes y con una coreografía sensacional (y no solamente lo digo yo, la película ganó el Oscar a la mejor dirección artística, mejor diseño de vestuario, mejor montaje y mejor banda sonora, y ganó también la Palma de Oro en Cannes).
* Bob Fosse murió de forma muy parecida al protagonista de este film, con quien le unía también cierto parecido físico.